OTOÑO - NOVIEMBRE.
Si hay algo que me apasiona del otoño es la luz, los colores, la naturaleza.
Mientras la idolatrada primavera es el explendor de la recién llegada, la alegría, la excitación y la energía desbocada, el otoño es la belleza de la madurez pausada, la traquilidad, el sosiego, el balance, la cosecha, el mirar dentro de uno mismo, y reorganizar el huracán veraniego.
Personalmente me suele sentar muy bien. Me recoloca en el epicentro, me relaja, y me da un tiempo precioso para mí misma.
No me pone triste, ni meláncolica. Sólo tranquila. Y en mi caso, eso una buena noticia :-)
Adoro la naturaleza en estas semanas. La lluvia, el barro, las hojas, los verdes y toda la maravillosa gama de marrones.
Me gusta noviembre, noviembre dulce. En el que las noches son frías, pero el sol calienta todavía y acaricia la cara. No me puedo resistir a los largos paseos en estos días, en estar fuera de casa saboreando cada cambio de temperatura, de nube y de lluvia.
Me gusta noviembre. Hace ocho años, en noviembre, fui a Holanda para recuperar una asignatura pendiente :-). Elegí noviembre para casarme, a contracorriente. Y también, aunque sin buscar la fecha expresamente, nació mi primera hija en noviembre.
He encontrado estas preciosas fotos en el blog de Inde que le cojo prestadas y coloreo con ellas esta página, pensándome si no hacerme un póster con ellas...
3 comentarios
Mlle Pompidou -
Besos.
laMima -
Comentario: No puedo estar más de acuerdo contigo: también yo adoro esta época. Me encanta esta melancolía que produce, la necesidad de buscar abrigo, sus colores..parece que tengamos más tiempo para pensar.
Y las fotos...se lo dije a Inde: un bálsamo.
Besicos.
Bernardo -
Comentario: Tienes razón, son unas fotos preciosas.